Costa Rica con niños en 7 días

¡Viajamos a Costa Rica con los pegotetes! Explorar Costa Rica con niños es toda una aventura y una experiencia inolvidable para todos. Si Costa Rica siempre ha sido uno de tus destinos pendientes, en este artículo te cuento qué visitar, dónde alojarte y qué gastronomía típica no debes perderte. Descubre volcanes, animales, playas y selvas. ¡Sigue leyendo!

Preguntas frecuentes para viajar a Costa Rica con niños

Con este sencillo cuestionario te ayudo a decidir cómo planear tu viaje a Costa Rica con niños en 7 días.

• ¿Quieres permanecer toda la semana en el mismo hotel o visitar varios puntos del país? Nosotros optamos por ver varias ciudades, así que tuvimos que alquilar coche y reservar alojamiento hasta en 4 hoteles diferentes. Si viajas con pegotetes más bebés, quizás prefieres quedarte en un sólo sitio toda la semana y tener un viaje más relajado.
• ¿Quieres alquilar coche o desplazarte en autobuses? Las carreteras de Costa Rica son famosas por sus curvas y mal estado de muchos tramos, así que si alquilas coche, ármate de valor y viaja con seguro. Un consejo, si tus peques son ya mayores y no quieres llevar las sillitas de coche, mi recomendación son los chalecos de RideSafer Travel Vest, ya que apenas ocupan espacio y sirven para cualquier coche.

• ¿Es tu primera vez o ya has visitado antes Costa Rica? Para nosotros era la primera vez, así que no podíamos perdernos la zona del Arenal y Monteverde, dos de los sitios más recomendados.
• ¿Da tiempo a ver todo en una semana? La respuesta es no, pero sí lo suficiente a descubrir este país y quedarte con ganas para volver. Una semana es tiempo suficiente para desconectar. Si son dos semanas, mucho mejor, porque podrás extender tu estancia en cada sitio.
• ¿Tengo que cambiar dólares a colones? Nosotros pensábamos hacerlo, pero al final no fue necesario. El dólar es una moneda aceptada y pudimos pagar todo sin problema, incluso en las tiendas locales.
• ¿Qué llevo en la maleta? Nosotros avisamos al pediatra que viajaríamos a Costa Rica y nos recomendó vacunarnos contra el tifus y llevar repelente antimosquitos. También nos dió medicinas para prevenir infecciones o diarrea, por si acaso. No olvides tampoco la crema para el sol. En cuanto a ropa, opta por calzado cerrado para andar, pantalones y ropa transpirable de manga larga, así evitas picaduras de bichitos. Por último, el impermeable es súper necesario, así que llévalo siempre en la mochila.

Día 1: Llegada a San José

Nuestro primer día aterrizamos en San José con escala en Dallas. El viaje en avión no fue demasiado pesado y por supuesto pusimos en práctica todos nuestros trucos para mantener entretenidos a los pegotetes en el avión. Una vez en San José, alquilamos un coche para tener la comodidad de desplazarnos con libertad.

Nos alojamos en un hotelito muy modesto en pleno centro de la ciudad. Un buen consejo es reservar hoteles con desayuno incluido, ya que así es un problema menos del que debes preocuparte y ganas tiempo durante tu viaje.

Esa tarde pudimos explorar caminando el centro de San José, incluidos los columpios, siempre necesarios si viajas con pegotetes. Cenamos unas quesadillas en el restaurante Jalapeños Central y nos fuimos pronto a descansar porque al día siguiente empezaba la aventura.

Día 2: La Fortuna y los Puentes Colgantes

La zona de La Fortuna es imprescindible, ya que es donde se encuentra el Volcán Arenal, los puentes colgantes (aunque tienes también en Monteverde) y las aguas termales.

Desde San José hay 3 horas en coche hasta La Fortuna. La carretera es difícil, pero las vistas son impresionantes, ya que buena parte del tramo es entre nubes. Mi consejo es que tengas alternativas para que tus peques estén entretenidos en el coche. En este artículo te cuento los trucos que nos funcionan. En concreto en este viaje usamos mucho los audiocuentos como alternativa a la tablet para que no se mareasen.

Bogarin Trail para ver perezosos

Si quieres ver perezosos, te recomiendo hacer esta ruta con guía, ya que suelen llevar unos prismáticos y conocen dónde descansan estos animales. Nosotros logramos ver uno colgado de un árbol, pero sólo gracias a que nos avisaron, ya que si no te vas fijando es difícil verlos.

La ruta es circular y muy facilita, llena de sombra y perfecta para ir con peques. El sitio tiene también una cafetería para recuperar fuerzas antes o después del paseo.

Mistico Park Arenal Hanging Bridges

Ese mismo día, hicimos la ruta de los puentes colgantes con los pegotetes. Si vas a Costa Rica con niños, esta actividad va a ser de sus favoritas, ya que los puentes colgantes, a pesar de ser muy seguros, se mueven bastante y es muy divertido. Bueno, divertido para los peques, terror para mi como adulta, pero nos reímos mucho.

La ruta es bastante larga y muy pesada si tus pegotetes son muy pequeños y no están acostumbrados a andar largas distancias. Llevar carrito para ellos no es una opción por el terreno, pero puedes llevar mochila de porteo o de hiking si aguantan bien en ella y tú puedes cargar su peso.

Aguas termales en el Hotel Paradise

Para acabar el día, nos fuimos a descansar y refrescarnos a las aguas termales. En esta zona tienes varios hoteles con hot springs perfectos para alojarte y descansar después de tanta caminata. Mi consejo es que los reserves cuanto antes ya que suelen estar muy solicitados.

Nosotros elegimos el Hotel Paradise y fue todo un acierto. Las aguas termales están calentitas, así que cuidado con tus pegotetes, ya que recomiendan ir saliendo de vez en cuando y ducharse con agua fría. A mí me encanta el agua caliente, pero hubo piscinas que el agua quemaba tanto que no pude ni entrar.

El desayuno está incluido, tienes música en directo todas las noches en el restaurante y las vistas del volcán desde el hotel son increíbles. Sin duda fueron las dos mejores noches de todo el viaje.

Día 3: Parque Nacional Volcán Arenal

¿A tus pegotetes les gustan los volcanes? Porque a mi hijo le encantan y tiene mucha curiosidad por saber más sobre ellos. Así que si viajas a Costa Rica con niños tienes que ver su volcán Arenal. En el Parque Nacional tienes diferentes rutas que te acercan a la ladera. Si viajas con bebés o personas mayores puedes hacer una ruta en coche que también tiene muy buenas vistas.

Fue en esta ruta donde sufrimos una de las lluvias tropicales tan comunes en Cost Rica, así que lleva siempre un chubasquero en la mochila. Al final de la ruta hay que escalar un poquito entre rocas, por lo que no olvides llevar un buen calzado cerrado de montaña para no resbalarte, especialmente si llueve.

Si tienes suerte y no hay muchas nubes, al final de la ruta podrás ver el volcán Arenal en su totalidad. A mi me impresionó bastante, así que ten lista tu cámara de fotos.

En este mismo Parque Natural seguro que verás coatíes, unos animales totalmente adaptados al hombre, así que siempre los verás a tu alrededor buscando algo de comida. Fue muy bonito volver a ver coatíes por segunda vez después de nuestro viaje a México, en concreto en Xcaret.

Una recomendación para comer después de la ruta del volcán, es el Restaurante Que Rico, con una pizza y pasta buenísimas y unas vistas increíbles justo en la ladera del volcán.

Días 4 y 5: Playas Conchal y Flamingo

Decidimos incluir la playa en nuestro viaje para dar un respiro a nuestros pegotetes y disfrutar dos días de la arena y las olas, ya que les encanta. Si viajas a Costa Rica con niños, no olvides adaptar también el viaje a sus necesidades e intereses.

Al cuarto día, nos despedimos de las aguas termales con todo mi dolor, para visitar las playas de Costa Rica en la zona de Playa Flamingo. Fueron 3 horas de viaje muy pesadas en la que se fue notando el aumento de temperatura.

Una de las playas más bonitas fue Playa Conchal, que debe su nombre a que en lugar de arena son pequeñas conchitas. Mi hija, una sirenita que colecciona conchas, como ya te conté en nuestro viaje a Florida, pudo disfrutar recogiendo conchitas de todas las formas y colores.

Esta playa tiene un pequeño arrecife en el que puedes ver pececitos nadando a tu alrededor. Me recordó mucho a las playas de Hawái por sus aguas cristalinas.

Algo que debes saber de las playas en Costa Rica es su difícil acceso. No esperes paseos marítimos y una rampa o escaleritas. Normalmente las playas están rodeadas de vegetación y necesitas caminar un tramo antes de acceder a ella, como es el caso de la playa Conchal (acceso a través de la playa Brasilito), o bien ir directamente en coche, como en la playa Flamingo.

Otro dato importante son sus olas, ya que rompen bastante fuerte y si vas a las playas de Costa Rica con niños, éstos deben estar vigilados y contigo en todo momento. Mis pegotetes y su padre fueron los que más disfrutaron de estas olas, sin duda.

Nos alojamos en el Hotel Conchal y si bien el mismo hotel es un pequeño oasis, en esa semana estaban arreglando la carretera así que el acceso a la playa lo hicimos sorteando grúas de construcción. Si a tus pegotetes les gustan los animales, en este hotel vimos lagartos, pájaros y hasta monos aulladores desde nuestra ventana. ¡No nos dejaron dormir!

Fue en esta etapa del viaje donde nos picaron algunos mosquitos y tuvimos algo de diarrea al no tener agua embotellada. Así que no olvides hacerte con varias botellas para tener siempre a mano.

En cuanto a comidas, lo más popular es el casado, un plato típico en Costa Rica con carne o pescado, arroz, verduras y plátano frito. Probé uno de carne en un sitio más turístico, y después uno de pescado en una soda local (así se llaman los restaurantes pequeños locales). ¡Delicioso!

Días 6 y 7: Monte Verde y Bosque Nuboso

Después de pasar dos días en la playa, nos dirigimos a Monte Verde en la última etapa del viaje. El Bosque Nuboso es de los recuerdos que más atesoro de este viaje. Ahora sabrás por qué.

Desde la zona de la playa son 3 horas de subida en coche por carreteras tortuosas. Pero tranquilo, merece totalmente la pena ya que el Bosque Nuboso fue de lo mejor de este viaje a Costa Rica con niños, por ser totalmente diferente a nada que hubiéramos visto antes.

Fuimos a la Reserva Santa Elena, un parque natural muy cuidado lleno de vida por todas partes. Esta vez decidimos hacer la ruta con guía, ya que no queríamos perdernos nada. Y de verdad que merece la pena el coste extra, ya que aprendimos muchísimo del ecosistema, las aves, las arañas, la historia de la reserva y hasta el cambio climático. Gracias a nuestra guía pudimos ver tarántulas y una mamá perezoso con su bebé.

Caminar entre nubes, escuchar los sonidos del bosque, sentir la humedad en la piel… ¡Fue una pasada! Recomiendo llevar algo de abrigo ya que la temperatura baja bastante al no llegar la luz del sol y estar a tanta altura. Y por supuesto, de nuevo no te olvides del impermeable porque suele lloviznar todo el tiempo.

Esta última noche nos alojamos en las cabañas de Monteverde Villa Lodge, con desayuno incluido. Pásate antes por la Soda La Cocina de Lety y disfruta de sus platos típicos para disfrutar de la comida costarricense.

Al día siguiente ya tocó hacer maletas y volver al aeropuerto en otro viaje en coche de 3 horas. Costa Rica era un país que teníamos muchas ganas de visitar y mereció totalmente la pena, especialmente con pegotetes, ya que tienes muchas opciones para adaptar las etapas a sus necesidades.

¿Ya conocías Costa Rica? ¿Te gustaría visitarlo pero no sabes cómo organizar el viaje? Deja tu opinión abajo en comentarios o bien visita las redes sociales de Pegotetes. ¡Hasta el próximo viaje!